Tom Jones de Zanzíbar es médico
cirujano, no cantante. Se llama igual que el Sir galés y
le encanta el parecido. Su simbiosis ha sido tal que no solo aprendió a cantar sex bomb sino que se viste y se peina
igual. Su cabello es intocable y motivo de conversación en el sanatorio donde
trabaja. Y donde se hace conocer, orgulloso, como el legendario tigre de Gales.
Es de lo mejor que hay en Zanzíbar. Sus profesores de facultad dicen que es
serio (léase complicado en el trato) pero seguro para operar. Sus alumnos
residentes del Hospital de Tongolandia han formulado quejas y denuncias por su
mezquindad para enseñar y por prácticas poco apropiadas. A algunas personas sin
embargo les resulta excéntrico o extravagante su modo de ser y de tratar a la gente. Cuando entra a algún lugar no mira a nadie, camina mascando goma y no
dice buenos días ni buenas tardes, nada. Hace lo que tiene que hacer y se va. Los
adjetivos que más suelen usarse para
referirse a él son: déspota, soberbio y prepotente. Sin embargo se cuenta que
en quirófano es un tipo divertido. Aparte del secador para el cabello y el cepillo para el brushing, tendría un mp3 con karaoke. A las instrumentadoras les canta you don´t have to be beautiful to turn me
on, I just need your body baby from dusk till dawn. Su vozarrón se escucha
hasta en el primer piso y con eco. Finaliza cuando se dispone a operar. Se para
firme y bien derecho, los mira a todos y entona por última vez you just leave it all up to me, I´ll show
you what it´s all about…
El tigre dice que cuando no está
en el sanatorio, no lo llamen por teléfono y que “no lo jodan”. Que se
arreglen. Parece que le tienen miedo y según dicen les desagrada mucho tratar
con él ya que es una persona “muy especial”. ¿Por qué alguien eligiría una
carrera tan larga y tan sacrificada si no ama lo que hace? Si ni siquiera
respeta su oficio…Teniendo la posibilidad de que una persona mayor,
tal vez sola y sintiéndose mal o temerosa se pueda sentir un poco mejor, entendida,
esperanzada, cuidada... por lo menos acompañada ¿por qué decidir hacer todo lo contrario? La diferencia está en el amor y en el cuidado que se dedica a cada cosa, no en una sutura magistral. O si el corte quedó más o menos derecho. La diferencia está en el amor y el respeto por la vida ¿Por qué
teniendo un ratito de poder circunstancial sobre otra persona no usarlo para
iluminarla y sanarla mejor? Eso también es como un poco de magia. Es tan
natural y tan escaso a la vez...
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